DECIMA CUARTA LUZ

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LEY DE POLARIDAD

“Todo es doble, todo tiene dos polos; todo, su par de opuestos: los semejantes y los antagónicos son lo mismo; los opuestos son idénticos en naturaleza, pero diferentes en grado; los extremos se tocan; todas las verdades son medias verdades; todas las paradojas pueden reconciliarse” (El Kybalion).

Esta ley encierra la verdad que todo es dual, todo tiene dos polos; todo su par de opuestos: positivo y negativo, día y noche, sístole y diástole, frío y calor, bueno y malo, etc.
Si nosotros tenemos odio en nuestro interior, por la ley de correspondencia (como es adentro, es afuera) ese odio interno va a atraer afuera acontecimientos negativos (peleas, enfermedades, etc.); por lo tanto, lo que tenemos que hacer es transmutar lo negativo en positivo: el odio en amor, y para ello nos polarizamos solamente en lo positivo (el amor) sintiendo el amor en la forma más intensa posible, olvidándonos del odio.
Es posible cambiar o transmutar las vibraciones de orgullo por vibraciones de humildad, en la propia mente y en la mente de los demás. El “arte de polarizar” se convierte en una fase de la alquimia mental. La perfecta comprensión de esta ley capacita para cambiar la propia polaridad, así como la de los demás, si uno se toma el tiempo y estudia lo necesario para dominar este arte.Esta ley explica que en cada situación hay dos polos, dos aspectos, y que los “opuestos” no son, en realidad, sino los dos extremos de la misma cosa, consistiendo la diferencia, simplemente, en diversos grados entre ambos. El calor y el frío, aunque opuestos, son realmente la misma cosa, consistiendo la diferencia, en diversos grados de aquella. Mirad un termómetro y tratad de averiguar donde empieza el calor y donde termina el frío.

LEY DE GENERACION

“La generación existe por doquier; todo tiene su principio masculino y femenino; la generación se manifiesta en todos los planos” (El Kybalion).

Principio generador: que engendra. Engendrar es procrear, dar la existencia. Función por medio de la cual se reproducen los seres organizados. Este principio obra siempre en el sentido de generar, regenerar y crear. Esta ley encierra la verdad de que la generación se manifiesta en todo, estando siempre en acción los principios masculino y femenino. Esto es verdad, no solamente en el plano físico, sino también en el mental y en el espiritual. En el mundo físico este principio se manifiesta como “sexo” y en los planos superiores toma formas más elevadas.
En una sala de clases el profesor es el polo masculino, activo, que entrega el conocimiento y el alumno es el polo femenino, pasivo, que recibe este conocimiento. Cuando este alumno llegue a profesor entonces se transformará él también en un nuevo polo masculino y activo enseñándoles a otros alumnos.